El día de entrega de notas es un momento muy curioso. En unos cuantos metros cuadrados se juntan un montón de chavales con sensaciones de todo tipo.
Alegría, tristeza, ira, júbilo son algunos de los sentimientos que ves reflejados en las caras de los alumnos.
Mientras algunos de mis compañeros terminaban de entregar notas, otros estábamos teniendo una interesante conversación sobre deporte.
Éramos un grupo bastante dispar, profes de filosofía, biología, alemán e incluso un alumno se unió a la conversación (aprovecho desde aquí para darle las gracias por ser uno de mis lectores más fieles).
Uno de los temas de los que hablamos (que es el que me ha dado la idea para esta entrada) es, qué diferencia a un deportista superclase de los deportistas mortales.
¿Por qué un deportista con unas características físicas similares a las de Gómez Noya o Mireia Belmonte entrenando lo mismo que ellos no llegan a obtener sus resultados?
No es una pregunta de sencilla respuesta, son muchos los factores que pueden influir, aunque después de darle muchas vueltas, en mi opinión son cinco los aspectos clave:
Genética
Este es un regalo que nos hacen nuestros padres.
Aunque dos personas tengan unas características similares (altura, peso, porcentaje de grasa corporal, etc) hay otros factores ligados directamente a la genética que afectan directamente al rendimiento deportivo.
El consumo máximo de oxigeno por ejemplo, aunque es trabajable y por tanto mejorable, tiene un limite marcado por la genética. Llegado un punto, aunque las dos personas tengan unas características físicas similares, su techo será distinto.
Talento
Esto no se compra y también es un regalo de nuestros padres.
Un deportista de máximo nivel de la disciplina que sea tiene talento para ese deporte.
En igualdad de condiciones el talento marcará la diferencia.
Vamos a poner un ejemplo, Messi o Cristiano Ronaldo entrenan lo mismo que el resto de sus compañeros. ¿Por qué son ellos los que marcan la diferencia? porque tienen más talento que ellos.
Cabeza
Otro de los factores que creo marcan la diferencia entre los deportistas top es su fortaleza mental. La capacidad de superar los momentos críticos e incluso de estar cómodos en las situaciones en la que la mayoría de las personas nos estresamos.
Vi una entrevista a Sergio Ramos en el programa "Universo Valdano" en el que le preguntaba como era capaz de meter goles siempre en situaciones criticas, su respuesta me llamó mucho la atención: "Me gusta estar en situaciones críticas, cuando las cosas se complican me siento cómodo"
Otra frase que he escuchado a una crack como Mireia Belmonte y me ha llamado mucho la atención
es: "Hay que disfrutar del sufrimiento"
Esa es la cabeza que tienen los grandes.
La buena noticia es que la cabeza se trabaja, se puede mejorar nuestra capacidad para afrontar situaciones complicadas. Es complicado llegar al nivel de fortaleza de un Rafa Nadal pero trabajando puedes mejorar bastante.
Trabajo
Este, para mi, es el único factor en el que los mortales nos podemos igualar a los superdeportistas. Podemos trabajar lo mismo que ellos, entrenar lo mismo que ellos.
Otra cosa es que nuestro organismo sea capaz de asimilar las cargas de entrenamiento de los superdeportistas, pero sobre el papel si que podemos igualarnos.
Entorno
Otro aspecto que sino es determinante también es importante.
Cuando hablo de entorno me refiero a familia, grupo de amigos, posibilidad de entrenar con facilidad, etc.
Hay muchos grandes deportistas que llegan a ser superclases a pesar de tener un entorno complicado, pero si te fijas en ellos, los que logran mantenerse en la pomada durante muchos años tienen un entorno ideal para que puedan desarrollar su trabajo lo mejor posible.
No se si habré resuelto las dudas de mis compañeros, y seguro que habrá gente que considera otros factores tan importantes como los que he expuesto, pero para mí estos son determinantes.
Darle duro!
domingo, 25 de junio de 2017
lunes, 19 de junio de 2017
¡Manos arriba, esto es un atraco!
Hace tiempo que vengo quejándome del precio de las inscripciones a los distintos eventos deportivos.
El lunes pasado a las 9 de la mañana estaba pegado a la pantalla del ordenador para poder inscribirme al mítico triatlón de Pálmaces, una de las pruebas con mas solera de España con 23 ediciones a sus espaldas. Este año será la edición número 24.
Las inscripciones se agotaron en menos de una hora.
Tengo muchas ganas de hacer este triatlón. Normalmente en julio suelo estar parado y este año, por circunstancias personales, alargo la primera parte de la temporada y no podía desperdiciar la oportunidad.
Vaya por delante que los 75€ de inscripción en una carrera de este tipo, aunque duelen un poco, tengo la seguridad que están bien invertidos.
Hay carreras donde merece la pena gastarse el dinero y otras donde directamente nos roban.
Ya tengo unos cuantos eventos deportivos a mis espaldas, no tengo el bagaje de otros compañeros que llevan más de 20 años en este mundo, pero ya tengo la experiencia suficiente como para decir que carrera merece la pena y cual no.
No termino de entender como una carera como Fuente Álamo puede crear un pedazo de evento para 1.000 personas incluyendo alojamiento, comidas, inscripción, etc. por 31€ y otras, en teoría de más importancia a nivel nacional, por ese mismo dinero apenas te dan una botella de agua durante la carrera.
Seguro que hay detalles que se me escapan, aspectos organizativos que desconozco, pero entre darte todo y no darte nada hay un término medio.
Como he dicho en otras ocasiones cada uno se gasta su dinero en lo que le da la gana, pero os invito a hacer una reflexión: no nos dejemos atracar.
Los deportistas somos los que tenemos la sartén por el mango. Si nosotros no pagamos la inscripción a una carrera, no hay carrera.
No nos volvamos locos, pagamos 100 o 200€ por una carrera a un año vista. Carrera que no será ni la primera ni la última que se cancela por "circunstancias ajenas a la organización".
Mi consejo, si es que quieres escucharlo, es que elijas con mimo la carrera a la que te quieres apuntar.
Hay carreras como Fuente Álamo, Zarautz, Pálmaces, etc. en las que merece la pena gastarse el dinero. Carreras en las que sabes que salvo catástrofe todo irá bien y se celebrará.
Analiza un poco el dinero que te gastas en inscripciones.
En mi caso, puedo decirte que al año entre carreras de montaña, carreras de asfalto, eventos deportivos múltiples y triatlones no me gasto menos de 300 - 400€. Eso sin dedicarme a la distancia IM, una inscripción para un triatlón de ese tipo empieza en los 300€.
Ya que nos dejamos un pico bueno de nuestro salario solo en participar en carreras (si analizas tus gastos en material, viajes, alimentación... tu presupuesto se multiplicará) al menos hay que gastártelo en eventos que merezcan la pena.
Pasa de carreras donde tu dinero va integro al bolsillo de un espabilado que ha visto negocio en el deporte.
Los organizadores tienen que ganar dinero, es lógico, pero también tienen que darte una prestación y eso a muchos se les olvida.
¿Cómo puedes saber que carrera merece la pena y cuál no?
Sencillo. Si, por ejemplo un triatlón, tiene 25 ediciones es que algo bien hacen. Un año la gente se puede equivocar, pero 25 son muchos años de gente equivocada.
Si el evento tiene menos solera es tan sencillo como preguntar a gente que ya lo haya hecho, o si es nuevo buscar información sobre los organizadores. Con un par de toques al ratón puedes obtener muchas opiniones acerca de la gente que está detrás de una carrera.
Lo dicho, gastaros vuestro dinero en lo que queráis, pero no os dejéis atracar.
Darle duro!
El lunes pasado a las 9 de la mañana estaba pegado a la pantalla del ordenador para poder inscribirme al mítico triatlón de Pálmaces, una de las pruebas con mas solera de España con 23 ediciones a sus espaldas. Este año será la edición número 24.
Las inscripciones se agotaron en menos de una hora.
Vaya por delante que los 75€ de inscripción en una carrera de este tipo, aunque duelen un poco, tengo la seguridad que están bien invertidos.
Hay carreras donde merece la pena gastarse el dinero y otras donde directamente nos roban.
Ya tengo unos cuantos eventos deportivos a mis espaldas, no tengo el bagaje de otros compañeros que llevan más de 20 años en este mundo, pero ya tengo la experiencia suficiente como para decir que carrera merece la pena y cual no.
No termino de entender como una carera como Fuente Álamo puede crear un pedazo de evento para 1.000 personas incluyendo alojamiento, comidas, inscripción, etc. por 31€ y otras, en teoría de más importancia a nivel nacional, por ese mismo dinero apenas te dan una botella de agua durante la carrera.
Seguro que hay detalles que se me escapan, aspectos organizativos que desconozco, pero entre darte todo y no darte nada hay un término medio.
Como he dicho en otras ocasiones cada uno se gasta su dinero en lo que le da la gana, pero os invito a hacer una reflexión: no nos dejemos atracar.
Los deportistas somos los que tenemos la sartén por el mango. Si nosotros no pagamos la inscripción a una carrera, no hay carrera.
No nos volvamos locos, pagamos 100 o 200€ por una carrera a un año vista. Carrera que no será ni la primera ni la última que se cancela por "circunstancias ajenas a la organización".
Mi consejo, si es que quieres escucharlo, es que elijas con mimo la carrera a la que te quieres apuntar.
Hay carreras como Fuente Álamo, Zarautz, Pálmaces, etc. en las que merece la pena gastarse el dinero. Carreras en las que sabes que salvo catástrofe todo irá bien y se celebrará.
Analiza un poco el dinero que te gastas en inscripciones.
En mi caso, puedo decirte que al año entre carreras de montaña, carreras de asfalto, eventos deportivos múltiples y triatlones no me gasto menos de 300 - 400€. Eso sin dedicarme a la distancia IM, una inscripción para un triatlón de ese tipo empieza en los 300€.
Ya que nos dejamos un pico bueno de nuestro salario solo en participar en carreras (si analizas tus gastos en material, viajes, alimentación... tu presupuesto se multiplicará) al menos hay que gastártelo en eventos que merezcan la pena.
Pasa de carreras donde tu dinero va integro al bolsillo de un espabilado que ha visto negocio en el deporte.
Los organizadores tienen que ganar dinero, es lógico, pero también tienen que darte una prestación y eso a muchos se les olvida.
¿Cómo puedes saber que carrera merece la pena y cuál no?
Sencillo. Si, por ejemplo un triatlón, tiene 25 ediciones es que algo bien hacen. Un año la gente se puede equivocar, pero 25 son muchos años de gente equivocada.
Si el evento tiene menos solera es tan sencillo como preguntar a gente que ya lo haya hecho, o si es nuevo buscar información sobre los organizadores. Con un par de toques al ratón puedes obtener muchas opiniones acerca de la gente que está detrás de una carrera.
Lo dicho, gastaros vuestro dinero en lo que queráis, pero no os dejéis atracar.
domingo, 11 de junio de 2017
Medidas de seguridad
Por desgracia seguimos hablando de ciclistas muertos en las carreteras. Sin ir mas lejos ayer un ciclista moría en Navarra.
Todo parece indicar que fue un accidente, pero como dije hace unas semanas todos debemos poner de nuestra parte.
Hay una palabra preciosa, empatía, que por si hay alguien que no sabe lo que significa es ponerse en el lugar del otro.
Esa palabra es la que más accidentes podría evitar.
Si un ciclista se pone en el lugar del conductor que va con prisa y si tiene posibilidad se pega al margen derecho para dejarle pasar, habrá conseguido que el conductor se vaya contento.
Si un conductor se pone en el lugar del ciclista que va terminando su entrenamiento bastante cansado y piensa que al ir a coger el bidón, el ciclista puede moverse involuntariamente hacia un lado, cuanto menos habrá evitado darle un susto al pasar rozándole con el coche.
Si la conductora de Denia hubiera pensado que conduciendo borracha y drogada no sólo se ponía en peligro a ella, sino a todas las personas que circulaban por la carretera esa mañana, todo lo que sucedió se podría haber evitado.
En la entrada de hoy no quiero volver a entrar exclusivamente en el tema de los ciclistas. Me gustaría hablar de las medidas de seguridad que nosotros como deportistas podemos tomar para evitar accidentes o, si son inevitables, al menos minimizarlos.
En bici (carretera y montaña)
Usa el casco siempre.
En ciudad no es obligatorio pero si altamente recomendable. Te pongo un ejemplo que me ha pasado a mi: circulando por el lateral del Paseo de la Castellana se rompió una rama de un árbol y me cayó en la cabeza. No me pasó nada grave, el casco se llevó todo el golpe que es para lo que está hecho y el agujero que se hizo se lo llevó él y no mi cabeza.
Usa luces también de día.
En bici es muy importante hacerse visible y las luces son una gran ayuda para eso. No van a evitar que un conductor en condiciones deplorables te lleve por delante pero si que harán que los conductores normales te vean con antelación.
Lleva siempre comida y recambios para reparaciones básicas.
Un gel no ocupa nada en tu maillot y si llega "el tío del mazo" te va a dar la vida.
Pinchar en medio de una carretera comarcal y no tener forma de arreglarlo te deja cara de tonto para varias horas.
Lleva el móvil cargado.
Úsalo cuando lo necesites pero no mientras montas en bici.
Explicar la ruta
Siempre explico la ruta que voy a realizar a mi familia. Si es por carretera dejo apuntados los pueblos por los que voy a pasar. En montaña, como suelo ir por los alrededores de mi pueblo, Torrelaguna, se lo dejo explicado a mi padre que es un experto en la zona y se conoce todos los rincones de allí.
Además tengo descargada en el móvil una app, "Alpify",tremendamente fácil de usar que te puede sacar de más de un apuro. Sólo tienes que pulsar el botón rojo y envía una alerta geolocalizada a los servicios de emergencias.
Corriendo y corriendo por montaña
Por suerte corriendo por la ciudad no necesitas grandes medidas de seguridad.
En la montaña si la tirada es larga, a partir de 14 - 15 km, llevo algo de comida por si me da el bajón y agua.
Llevo el móvil cargado, la app que os dije preparada y la mejor protección de todas, mi perra Arya.
Ningún compañero de carrera va a estar tan preocupado por mi como lo está ella.
Como buen Pastor Alemán que es, Arya siempre está atenta a lo que pueda pasar.
Nadando en aguas abiertas
He de confesar que esta es con diferencia la actividad que más miedo me da hacer solo. Se que es un miedo irracional, pero nadar en solitario en el mar me da más que respeto.
Uso neopreno, me da flotabilidad y protección térmica, salvo en el Mediterráneo en verano que está como el caldo.
Me pongo un gorro de color llamativo para que me vean desde la costa o desde los cientos de barcos de recreo que hay en Jávea.
Usar boyas que te hacen visible, donde puedes transportar cosas (teléfono, agua, etc) y que en caso de emergencia te pueden servir de agarre es una buena idea.
Haciendo metros en el Mediterráneo.
Haciendo surf
Rara vez hago surf solo, pero las veces en que meto al agua sin compañía hago un pequeño ritual, es el mismo que hago cuando surfeo con amigos, pero me lo tomo si cabe mas en serio.
Observo el mar, busco donde están las corrientes, zonas donde las olas rompen de forma extraña y los desagües naturales de la playa.
Caliento mientras observo a otros surfistas. Me fijo en dónde cogen las olas, como rompen, que nivel tiene la gente que está en el agua y donde puedo posicionarme al entrar.
Me meto al agua con calma y sin derrochar energía.
Cuando empiezo a notar que fallo mucho, que me caigo, en definitiva que empiezo a estar cansado me salgo. Respeto mucho al mar como para enfrentarme a él con la energía baja.
Haciendo snowboard y montaña en general
La mayor medida de seguridad que se puede tener en la montaña es saber cuando algo no se puede hacer.
Si el tiempo es malo no es el día de bajar por la pala a la que tenías echada el ojo, si el riesgo de avalancha es alto te tocará quedarte en el entorno de la estación.
En general, cuando voy a la montaña siempre llevo un pequeño kit con una navaja, una linterna, algo de comida y el móvil siempre cargado. Tengo hasta un pedernal, que cuando hago rutas largas, me gusta llevar por si las moscas. Pero eso ya es una fricada mía.
Como os decía antes todas estas medidas os pueden ayudar a evitar accidentes o minimizarlos. Os he hablado de mis deportes, os recomiendo que os pareis a pensar en los vuestros.
Para todos los deportes la principal medida de seguridad es el sentido común.
He escrito esta entrada mientras veía como Rafa Nadal ganaba su décimo Rolland Garros.
No se puede estar mas orgulloso de un deportista como este. Humilde, trabajador, agradecido... No hay adjetivos suficientes para describirle. Un crack!
#NiUnCiclistaMuertoMas
Darle duro!
Todo parece indicar que fue un accidente, pero como dije hace unas semanas todos debemos poner de nuestra parte.
Hay una palabra preciosa, empatía, que por si hay alguien que no sabe lo que significa es ponerse en el lugar del otro.
Esa palabra es la que más accidentes podría evitar.
Si un ciclista se pone en el lugar del conductor que va con prisa y si tiene posibilidad se pega al margen derecho para dejarle pasar, habrá conseguido que el conductor se vaya contento.
Si un conductor se pone en el lugar del ciclista que va terminando su entrenamiento bastante cansado y piensa que al ir a coger el bidón, el ciclista puede moverse involuntariamente hacia un lado, cuanto menos habrá evitado darle un susto al pasar rozándole con el coche.
Si la conductora de Denia hubiera pensado que conduciendo borracha y drogada no sólo se ponía en peligro a ella, sino a todas las personas que circulaban por la carretera esa mañana, todo lo que sucedió se podría haber evitado.
En la entrada de hoy no quiero volver a entrar exclusivamente en el tema de los ciclistas. Me gustaría hablar de las medidas de seguridad que nosotros como deportistas podemos tomar para evitar accidentes o, si son inevitables, al menos minimizarlos.
En bici (carretera y montaña)
Usa el casco siempre.
En ciudad no es obligatorio pero si altamente recomendable. Te pongo un ejemplo que me ha pasado a mi: circulando por el lateral del Paseo de la Castellana se rompió una rama de un árbol y me cayó en la cabeza. No me pasó nada grave, el casco se llevó todo el golpe que es para lo que está hecho y el agujero que se hizo se lo llevó él y no mi cabeza.
Usa luces también de día.
En bici es muy importante hacerse visible y las luces son una gran ayuda para eso. No van a evitar que un conductor en condiciones deplorables te lleve por delante pero si que harán que los conductores normales te vean con antelación.
Lleva siempre comida y recambios para reparaciones básicas.
Un gel no ocupa nada en tu maillot y si llega "el tío del mazo" te va a dar la vida.
Pinchar en medio de una carretera comarcal y no tener forma de arreglarlo te deja cara de tonto para varias horas.
Lleva el móvil cargado.
Úsalo cuando lo necesites pero no mientras montas en bici.
Explicar la ruta
Siempre explico la ruta que voy a realizar a mi familia. Si es por carretera dejo apuntados los pueblos por los que voy a pasar. En montaña, como suelo ir por los alrededores de mi pueblo, Torrelaguna, se lo dejo explicado a mi padre que es un experto en la zona y se conoce todos los rincones de allí.
Además tengo descargada en el móvil una app, "Alpify",tremendamente fácil de usar que te puede sacar de más de un apuro. Sólo tienes que pulsar el botón rojo y envía una alerta geolocalizada a los servicios de emergencias.
Corriendo y corriendo por montaña
Por suerte corriendo por la ciudad no necesitas grandes medidas de seguridad.
En la montaña si la tirada es larga, a partir de 14 - 15 km, llevo algo de comida por si me da el bajón y agua.
Llevo el móvil cargado, la app que os dije preparada y la mejor protección de todas, mi perra Arya.
Ningún compañero de carrera va a estar tan preocupado por mi como lo está ella.
Nadando en aguas abiertas
He de confesar que esta es con diferencia la actividad que más miedo me da hacer solo. Se que es un miedo irracional, pero nadar en solitario en el mar me da más que respeto.
Uso neopreno, me da flotabilidad y protección térmica, salvo en el Mediterráneo en verano que está como el caldo.
Me pongo un gorro de color llamativo para que me vean desde la costa o desde los cientos de barcos de recreo que hay en Jávea.
Usar boyas que te hacen visible, donde puedes transportar cosas (teléfono, agua, etc) y que en caso de emergencia te pueden servir de agarre es una buena idea.
Haciendo surf
Rara vez hago surf solo, pero las veces en que meto al agua sin compañía hago un pequeño ritual, es el mismo que hago cuando surfeo con amigos, pero me lo tomo si cabe mas en serio.
Observo el mar, busco donde están las corrientes, zonas donde las olas rompen de forma extraña y los desagües naturales de la playa.
Caliento mientras observo a otros surfistas. Me fijo en dónde cogen las olas, como rompen, que nivel tiene la gente que está en el agua y donde puedo posicionarme al entrar.
Me meto al agua con calma y sin derrochar energía.
Cuando empiezo a notar que fallo mucho, que me caigo, en definitiva que empiezo a estar cansado me salgo. Respeto mucho al mar como para enfrentarme a él con la energía baja.
Haciendo snowboard y montaña en general
La mayor medida de seguridad que se puede tener en la montaña es saber cuando algo no se puede hacer.
Si el tiempo es malo no es el día de bajar por la pala a la que tenías echada el ojo, si el riesgo de avalancha es alto te tocará quedarte en el entorno de la estación.
En general, cuando voy a la montaña siempre llevo un pequeño kit con una navaja, una linterna, algo de comida y el móvil siempre cargado. Tengo hasta un pedernal, que cuando hago rutas largas, me gusta llevar por si las moscas. Pero eso ya es una fricada mía.
Como os decía antes todas estas medidas os pueden ayudar a evitar accidentes o minimizarlos. Os he hablado de mis deportes, os recomiendo que os pareis a pensar en los vuestros.
Para todos los deportes la principal medida de seguridad es el sentido común.
He escrito esta entrada mientras veía como Rafa Nadal ganaba su décimo Rolland Garros.
No se puede estar mas orgulloso de un deportista como este. Humilde, trabajador, agradecido... No hay adjetivos suficientes para describirle. Un crack!
#NiUnCiclistaMuertoMas
Darle duro!
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